El blanco y negro en la cinematografía

El blanco y negro en la cinematografía

Fotograma de la película Psicosis (Alfred Hitchcock, 1960)

 

El uso del blanco y negro se remonta a los inicios del cine al ser la técnica original de registro de imágenes en movimiento. Su uso perduró durante muchas décadas hasta que apareció el color en el cine hacia finales de los años 50, principios de los años 60. El lenguaje cinematográfico se desarrolló durante los inicios del cine en blanco y negro, de ahí que los recursos narrativos y expresivos de la iluminación y la composición en cine fueron logrados con esa estética con la finalidad de producir los efectos dramáticos que la caracterizan. En esta nota haremos un breve recorrido por algunas de las cualidades del blanco y negro en la cinematografía.

 

Evoca el pasado

El blanco y negro en el cine hoy día se ha utilizado como un recurso narrativo donde tradicionalmente evoca escenas del pasado, o atmósferas nostálgicas y melancólicas. Algunos directores se han valido del blanco y negro para hacer películas ambientadas en la época del cine mudo, sumergiendo al espectador por completo en la experiencia sensorial de experimentar la realidad en tonos de grises y contraluces. Tal es el caso de la película The Artist, dirigida por Michel Hazanavicius y ganadora del Oscar a mejor película del año en 2012, como ya lo han hecho autores de la talla de Ingmar Bergman, Federico Fellini y Akira Kurosawa, por citar algunos.

 

Fuerza expresiva

El blanco y negro en el cine suele ser utilizado de manera más artística por los cineastas por su capacidad expresiva y de abstracción de la realidad. El mundo “real” está lleno de colores, por lo que una película en blanco y negro suele trasladar al espectador a una representación subjetiva y hasta surrealista de la realidad.  Muchos cineastas como David Lynch, han aprovechado muy bien ese recurso en sus creaciones para imprimirles un aire de misterio, surrealismo, subjetividad y mucho simbolismo.

 

Estética clásica

La estética en blanco y negro es considerada clásica. Películas que han trascendido como íconos clásicos de la cinematografía son en blanco y negro, tales como “Casablanca” (1942) de Michael Kurtis , “Ciudadano Kane” (1941) de Orson Welles, “Psicosis” (1960) de Alfred Hitchcok, son solo algunos de las más emblemáticas. Más recientemente, películas que evocan ese clasicismo y se hicieron en blanco y negro son por ejemplo La Lista de Schindler (1993) de Steven Spielberg o Sin City (2005) de Robert Rodríguez.

 

Fotograma de la película La lista de Schindler (Steven Spielberg, 1993)

 

Técnica de experimentación

Si bien al principio el blanco y negro surgió como la opción única por las limitaciones técnicas de la época, hoy día representa una opción artística y estética para el cine. Varias corrientes artísticas se decantaron por el uso del blanco y negro como recurso expresivo estético y tuvieron un extraordinario resultado en este tipo de cine. Tal fue el caso de la corriente del cine expresionista alemán, de la que son pioneros los directores Fritz Lang (El gabinete del doctor Caligari-1919) y Friedrich Wilhelm Murnau (Nosferatu-1922),  el surrealismo en el cine con El Perro Andaluz de Luis Buñuel, el neorealismo italiano de Vittorio de Sica con El Ladrón de Bicicletas, y más recientemente Eraserhead de David Lynch, considerado el más importante exponente del surrealismo cinematográfico en la actualidad, y quien ha usado blanco y negro a lo largo de su obra en varias formas experimentales.

 

Efectos del blanco y negro en el cine

El blanco y negro es una opción que se toma intencionalmente por sus cualidades y por los efectos que produce, tanto como recurso estético expresivo para el director, como para generar emociones en el espectador. A continuación, nombraremos algunos de los más importantes efectos del blanco y negro en el cine

  • Documental. Esta película rodada en Cracovia, Polonia en 1993, tiene un tono documental con una intensa carga de realismo. El director de fotografía Janusz Kaminski deseaba darle a las imágenes un sentido atemporal para que quien viera la película “no supiera cuando se había filmado”. Leonard Maltin quien fue Presidente de la Asociación de Críticos Cinematográficos de Los Ángeles en los años ’90, distinguió el filme como “una asombrosa adaptación de la novela de Keneally, que luce y se siente como algo que no se había hecho antes en Hollywood”, además considera que es “la película más intensa y personal rodada por Spielberg hasta la fecha”.

 

Fotograma de la película La lista de Schindler (Steven Spielberg, 1993)

 

  • Intriga y misterio. El uso del contraluz o contraste entre las luces y sombras, las siluetas, la cinematografía con clave alta y clave baja, típica de la estética del blanco y negro en el cine, ha sido ampliamente utilizado por las películas para generar un clima de intriga y misterio. Directores como Alfred Hitchcock, el maestro del cine de suspenso y de las películas de misterio, son genios que supieron aprovechar este recurso y lograron con éxito grandes obras en blanco y negro siendo todavía clásicos de la cinematografía mundial. La película “Los pájaros”, es un excelente ejemplo de cómo el uso del recurso expresivo del blanco y negro es clave para generar un clima de tensión y suspenso en el espectador.

 

  • Terror.  El cine de terror es uno de los géneros que también se nutren de la estética del blanco y negro, ya que las emulsiones de blanco y negro en alto contraste permiten resaltar detalles que infunden miedo en el espectador. Sobran los ejemplos, como Nosferatu (1922) de F. W. Murnau, La Noche de los Muertos Vivientes (1990) de George Romero o Psicosis (1960), de Alfred Hitchcock.

 

  • Abstracción. La estética del blanco y negro tiene la capacidad abstraer al espectador de la realidad, abre la puerta a puestas en escena en lugares que no son la realidad (puesto que la realidad la percibimos en colores) y facilita situar al espectador en un contexto irreal y fantástico, por lo que puede interpretar la historia e identificarse con los personajes más íntima e intensamente. El mejor ejemplo del uso del blanco y negro para crear una abstracción cinematográfica es Eraserhead (1977) de David Lynch.

 

Cartel de la película Eraserhead (David Lynch, 1977)

 

  • Minimalismo y sencillez. La estética del blanco y negro contribuye a crear composiciones más limpias, minimalistas y que contribuyen a centrar la atención del espectador en la historia. En muchos casos, utilizada de manera expresiva, el blanco y negro ha sido ampliamente aprovechada para fines artísticos en películas como Las Fresas Salvajes (1957) y El Séptimo Sello (1957), de Ingmar Bergman, o Manhattan (1979) de Woody Allen

 

Fotograma de la película Manhattan (Woody Allen, 1979)

 

  • Maquillaje, efectos visuales y suavización de la realidad. La paleta de grises permite disimular imperfecciones en elementos escenográficos, efectos de maquillaje o presentar una realidad que es cruda a la vista de forma suavizada, como el caso de Freaks (1932) de Tod Browning y El Hombre Elefante (1980) de David Lynch. En producciones de ciencia ficción permitía a los estudios y a realizadores independientes recrear mundos del futuro de forma más convincente y presentar distopías y utopías como la célebre Metrópolis (1927) de Fritz Lang y THX-1138 de George Lucas.

 

  • Retrotraer al espectador al pasado. Tal como mencionamos al principio, el blanco y negro evoca el pasado por lo que muchas películas actuales abogan por este recurso para simular escenas que rememoran épocas pasadas. Tal es el caso de El Artista, del 2012 o la notable película polaca Cold War de Pawel Pawlikowski.

 

Fotograma de la película Cold War (Paweł Pawlikowski, 2018)

 

  • Atmósfera subjetiva y onírica. Muchas películas se valen del blanco y negro para crear una atmosfera subjetiva y onírica en sus escenas, gracias a su gran intensidad. El modo de aplicar la luz a veces sugiere que la historia transcurre en otra dimensión o lugar diferente del real. El mejor ejemplo es sin duda El Mago de Oz de Robert Wise.

Aproximarse al cine en blanco y negro puede resultar una experiencia muy enriquecedora si lo hacemos desde una mirada reflexiva. La iluminación en la cinematografía en blanco y negro es una de las más efectivas a la hora de crear ambientes y crear composiciones o efectos especiales para impactar al espectador creando un clima de suspenso, misterio, nostalgia o romanticismo. Desde un punto de vista didáctico, es la técnica básica para aprender sobre composición e iluminación.

En conclusión, la estética del blanco y negro ha llevado a muchos directores en la actualidad a querer darle un toque creativo y de mayor fuerza expresiva a sus obras, así como también para homenajear al cine clásico o evocar épocas pasadas, dotar a la trama de minimalismo, misterio, intensidad, suspenso, intemporalidad, subjetividad, entre otras razones.